¿ Quieres perder el peso ganado en Navidad ?
Hoy os voy a explicar brevemente las diferencias entre los espárragos blancos y los verdes, y también todas las propiedades y efectos beneficiosos que ambos tienen para nuestro organismo.
En principio, podemos decir que los espárragos blancos son los que no han visto el sol, que han crecido debajo de la tierra y se recogen sacándolos de ella. Eso sí, a veces vemos que tienen una pequeña entonación rosácea justo en la yema, lo que querrá decirnos que ese espárrago ya despuntaba algo de su “entierro” y empezaba a ver la luz.
Por lo tanto, si son verdes querrá decir que han salido al exterior y que han estado expuestos al sol.
Así pues, son el mismo producto, pero en diferente etapa de recolección.
A mi particularmente me encantan los dos tipos, su sabor y sus texturas. Tomarlos simplemente un poco pelados y directamente cocidos, aliñados con un poco de sal, aceite de oliva y vinagre, me parecen un plato exquisito.
Y, por supuesto, vamos a nombrar sus beneficios:
• Son un potente diurético natural
• Son también un potente antioxidante (fortalecen todos nuestros vasos sanguíneos)
• Llevan fama de gran afrodisiaco
• Lo que sí puedo confirmaros es que nos dan un plus de energía, son un alimento energizante
• Son desintoxicantes, ya que contienen mucho potasio, y éste nos ayuda muchísimo a depurar nuestro organismo, con lo cual son un alimento muy depurativo
• Además, son una gran fuente de vitaminas A, C, E y K
• Bajos en calorías, son recomendables como primer plato o incluso como cena en todas las dietas, por su bajo aporte calórico
• Y, por último, y no lo podemos olvidar que son muy ricos en fibra.
Pues ahí os dejo la información. Espero os sirva para aprovechar más este producto tan típico de nuestra tierra, que tanto fresco como en conserva sigue siendo de lo más completo.
