Muchas veces nos encontramos ante un problema: saber con claridad cuál es la diferencia entre Porción y Ración.
Vamos a intentar aclararlo:
Porción: es la cantidad de alimento que una persona “decide” comer en un momento dado. Y, claro, puede estar equivocado y estar comiendo lo que deberían comer entre varios.
Ración: es la cantidad de alimento que recomiendan los expertos para prevenir y alejar las enfermedades, o sea, lo que se debería ingerir para tener una buena salud o no perjudicarla.
¿Y qué está sucediendo hoy en día? Una distorsión de la porción, con un resultado muy previsible, que no es más que esos kilos de más que afectan a tanta gente.
Poco a poco las porciones, en general, se han ido agrandando: las hamburguesas son más grandes, las copas de vino también son más grandes, y eso nos induce a beber más. Y lo mismo ocurre con el tamaño de los platos, o con el simple hecho de utilizar un bol en lugar de un plato sopero.
Un estudio realizado en el Reino Unido ha destacado que uno de cada diez padres ofrece a sus hijos pequeños, de manera regular, porciones de tamaño de adulto, sobre todo si se trata de alguno de sus platos preferidos, como las patatas fritas o los espaguetis. Y, sin embargo, los padres estaban preocupados porque no comían lo suficiente, y no porque estuvieran comiendo en exceso.
Pero los fabricantes utilizan una táctica contraria: incluyen en las etiquetas los componentes de una ración pequeña -aunque saben que se tomarán el triple de lo que ellos consideran- o las fotos de los paquetes con platos super llenos y rebosantes, cuando la ración del producto en cuestión debe ser muy inferior.
Como conclusión, yo os diría que nuestro plato, más allá de contar las raciones, debe estar compuesto por un 50% de alimentos de origen vegetal, un 25% de cereales y el otro 25 % restante de proteína saludable (legumbre, pescado, aves y huevos). Además, es recomendable utilizar un buen aceite de oliva, con moderación, y sobre todo, mantenerse activo.
