Los alimentos termogénicos son aquellos que generan una gran cantidad de calor en el organismo mediante sus reacciones químicas de digestión y absorción de nutrientes. En invierno, son ideales para hacer frente a las bajas temperaturas. Para lograr esta sensación de calor, consumen un gran número de calorías.
¿Y qué os digo siempre yo? “El frío adelgaza”
Muchos de los alimentos termogénicos son especias y condimentos que contienen elementos que activan la descomposición de la grasa y de los triglicéridos sanguíneos. Entre los más valorados tenemos:
1. Jengibre. Su compuesto activo es el gingerol. Además de actuar como antiinflamatorio natural, promueve su efecto termogénico gracias a su capacidad vasodilatadora. Incrementa la acción metabólica del organismo, optimizando la combustión de los lípidos. Favorece la digestión y activa la producción de insulina.
2. Canela. Su compuesto activo es la cumarina. Es muy apropiada en los problemas cardiovasculares, ya que diluye la densidad sanguínea, favorece la circulación y acelera el metabolismo. Su efecto termogénico se activa con media cucharadita diaria, espolvoreada en el desayuno, en meriendas, infusiones o batidos.
3. Alforfón o Trigo sarraceno. Sus principios activos son la rutina y la quercetina. Este pseudocereal carente de gluten tiene propiedades termogénicas, es prebiótico y depurativo. Se consume como cereal rico en proteínas, en forma de guisos, sopas o papillas. Con su harina se elaboran deliciosas crepes, así como pizzas y panes aptos para personas celiacas.
4. Pimientos picantes. El compuesto activo de los chiles, la cayena o las guindillas es la capsaicina, que les aporta su sabor picante y genera una gran cantidad de calor en el organismo, estimulando la sudoración. Al mismo tiempo favorece la saciedad y permite una gran oxidación de las grasas corporales, incrementando el metabolismo basal. Se pueden incluir en todo tipo de guisos y platillos como un condimento, que aporta su característico sabor picante.
5. Pimienta negra. Su principio activo es la piperina. Como la capsaicina, es estimulante de las proteínas del sistema nervioso que regulan la temperatura corporal, elevándola. Activa el metabolismo que consume calorías e inhibe la formación de células grasas. Este condimento clásico puede formar parte de la mayoría de platos en invierno, para ayudar a mantener el calor corporal.
Ene
09