La caída del pelo es un problema que preocupa tanto a hombres como a mujeres, hasta el punto de afectar a la confianza en uno mismo.
Aunque parezca un problema meramente estético, detrás puede haber un déficit de nutrientes o alguna patología como la anemia, el estrés, una enfermedad tiroidea o desajustes hormonales. En el caso concreto de las mujeres, las menstruaciones abundantes, el periodo postparto o la menopausia pueden estar detrás de una pérdida excesiva de pelo.
¿Cuándo empieza a ser preocupante?
Se sabe que, al día, se pueden llegar a caer hasta 100 cabellos, y se considera normal. Hay períodos, como el otoño, en los que la caída puede ser más abundante, hasta el punto de doblarse esta cantidad sin que haya ningún problema de salud. Es muy habitual recurrir a remedios externos, pero nos olvidamos de lo más básico: nutrir el pelo desde dentro para que sea fuerte, brillante y con vitalidad.
¿Qué podemos hacer para nutrir nuestro pelo?
Para afrontar el cambio de estación es importante nutrir el pelo desde el interior y eso se hace a través de la alimentación. Debemos asegurarnos de incluir los siguientes alimentos en nuestra dieta:
1. Alimentos ricos en vitamina C como el kiwi, los cítricos, las fresas, el pimiento rojo, la acerola o el brócoli, que ayudan a la correcta formación del colágeno y nos protegen de la oxidación de nuestras células.
2. Los cereales integrales, que nos aportarán silicio, fundamental en la síntesis de colágeno y elastina de nuestro pelo, piel, uñas y tendones.
3. El azufre, que es un mineral abundante en el cabello, presente en las crucíferas (col, coliflor, brócoli, kale, etc.), así como en el ajo, la cebolla y la clara de huevo.
4. Las semillas de calabaza y sésamo, que nos aportarán zinc, un mineral importante para el crecimiento del pelo.
5. Las legumbres, las semillas de sésamo, los germinados de alfalfa y la espirulina, que nos proporcionan hierro
6. Y finalmente el huevo, que es rico en proteínas que permiten formar la queratina, la principal proteína del cabello y en biotina (vitamina B8), necesaria para la formación del pelo.
La pérdida abundante de cabello de forma habitual, tiene en la anemia y en el estrés dos de sus causas más comunes. Si necesitamos algún tipo de suplementación, deberemos siempre recurrir a un especialista.
